El ozono estratosférico
tiene un efecto de contención de la radiación ultravioleta
nociva proveniente del sol. Si esta radiación alcanzara la superficie
de la tierra, no existiría la vida como la conocemos, ya que las
moléculas orgánicas son destruidas por la radiación
ultravioleta.
La intensidad de radiación que llega a la superficie terrestre depende
en gran medida de la masa de aire que debe atravesar, y las propiedades
de absorción de esta. El tamaño de la masa de aire que debe
atravesar depende del ángulo entre el sol y la superficie terrestre,
siendo este mínimo (por lo tanto menor absorción) en verano
y alrededor del mediodía. Gran parte de la radiación con longitud
de onda menor que 300 nm (UV, por lo tanto de mayor energía) es eliminada
por la atmósfera. La existencia de la vida, como se ha desarrollado
en la tierra, depende de la eliminación efectiva de la radiación
UV, ya que destruye los enlaces químicos de las substancias orgánicas
(proteínas y ácidos nucleicos). La atmósfera realiza
eficientemente este proceso principalmente por las absorciones de oxígeno
(O2 ) y ozono (O3):
El agujero de ozono en la Antártica se ha producido por la progresiva
acumulación de Clorofluorocarbonos (CFC), los cuales son continuamente
lanzados a la atmósfera por los procesos industriales. Por las características
de viento en la atmósfera, estos compuestos se acumulan en la Antártica
generando el agujero de ozono. Durante la primavera (Septiembre a Noviembre)
el agujero de ozono alcanza grandes dimensiones, llegando incluso a cubrir
la undécima región. El aumento de tamaño durante este
período, se debe a las características especiales de la Antártida.
Desde Mayo a Septiembre se produce un remolino de viento (vórtice)
sobre el polo sur que mantiene aislado el aire del interior. Dentro del
remolino se produce una gran baja de temperatura y creación de nubes
estratosféricas de agua y ácido nítrico. Además,
dentro de estas nubes polares se producen reacciones químicas que
liberan cloro. Con la llegada de la primavera (Octubre Noviembre), aumenta
la luz solar y las moléculas de cloro se activan destruyendo el ozono
dentro del vórtice. A fines de Noviembre, el vórtice se comienza
a abrir, y la masa de aire carente de ozono se libera alcanzando la zona
de Magallanes. |